Tiene el tamaño de un salami artesanal tradicional y se embute en tripa natural atada a mano. Se puede reconocer por la característica masa de grano grueso, por el hermoso color rojo brillante y por el justo equilibrio entre las partes magras y grasas. Su perfume, su sabor y su suavidad son incomparables.

En cuanto al Cucito, la salchicha se obtiene del uso de cerdos maduros y pesados ​​nacidos en Italia, criados en el territorio y sacrificados en la granja. El procesamiento se realiza según la tradición campesina de nuestros valles. A esto le sigue la sazón y el refinamiento de sabores en espacios aireados y bodegas naturales .

La característica principal de este salami es el aprovechamiento de todas las partes del cerdo, incluidas las nobles y la ausencia de gluten, leche y sus derivados.